Los nacimientos navideños consisten en la representación del lugar en donde nació Jesús, mediante una especie de maqueta del pesebre en Belén y sus alrededores.
Los elementos principales que presentan los nacimientos son el pesebre, las figuras que representan a la Sagrada Familia (Jesús, María y José), los animales, los pastores, los tres reyes magos y una estrella con una estela que también suele colocarse en lo alto del árbol de Navidad.
Aunque todos los pesebres tienen como objetivo recordar el nacimiento de Jesús y sus protagonistas, la forma de hacerlo y decorarlo varía de acuerdo con cada país y cada región, ya que su construcción lleva una marcada influencia cultural. Entre los tipos que podemos encontrar destacan:
Pesebre bíblico: En él se reproducen todos los elementos propios de la época en que nació Cristo en Belén, como casas, animales y gente. En lo estético, destacan los colores tierra en alusión al desierto.
Generalmente, se decora con plantas naturales, sin embargo, el musgo puede ser reemplazado por papel verde o pasto sintético.
Pesebre típico: Es una adaptación del pesebre a la cultura de cada región. Muchas veces, el tipo de casas y animales no son los comunes de Belén.
Pesebre ornamental: Tiene un carácter artístico, donde la imaginación y la creatividad de quien lo hace juega un papel importante. Por ello, vemos pesebres hechos en plastilina, cuero, madera, vidrio, barro, pintura, tela, metal y porcelana.
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