Que siempre no. Rappipay, filial del unicornio colombiano Rappi, ha desistido de obtener una licencia para operar una Institución de Fondos de Pago Electrónico (IFPE) en términos de la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera, conocida como Ley Fintech.
Esto, en línea con el cierre de su cuenta de débito Rappicuenta — operada por Rappipay —, que se anunció desde inicios de año; actualmente, la apuesta en servicios financieros de la firma de origen colombiano es Rappicard, su producto de tarjeta de crédito, que opera en parte, mediante una alianza con Banorte.
De acuerdo con documentos en poder de este medio, Rappipay México obtuvo en junio del 2021 su autorización condicionada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) para operar su IFPE, es decir, solo tenía que cumplir algunos requisitos administrativos para publicarse su aval definitivo en el Diario Oficial de la Federación.
Rappipay inició operaciones antes de la promulgación de la Ley, por lo que se encontraba en el supuesto del octavo transitorio de la normativa, es decir, podía operar hasta que la autoridad resolviera su solicitud y en caso de desistirse o negarse la misma, tendría que dejar de funcionar.









