El Departamento de Agricultura de Estados Unidos reportó que los precios mayoristas de vegetales subieron 40 % en julio de 2025 respecto al mismo mes del año anterior, según datos citados por ABC News.
Expertos atribuyen este incremento a la aplicación de nuevos aranceles sobre importaciones clave, lo que ha generado presión directa en la cadena de suministro y encarecido el acceso a productos básicos.
Los aranceles han alterado la dinámica comercial entre Estados Unidos y sus principales socios agrícolas, encareciendo costos de producción y transporte. Distribuidores y mayoristas enfrentan márgenes reducidos, lo que obliga a trasladar el aumento al consumidor final. Este fenómeno afecta tanto a supermercados como a restaurantes que dependen de insumos frescos, y eleva el riesgo de inflación en la canasta básica.
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Efectos en empresas y consumidores
La presión sobre la oferta ha provocado que algunos proveedores busquen diversificar orígenes de importación, aunque el proceso es lento y costoso. Las pequeñas empresas del sector restaurantero son las más vulnerables, ya que carecen de reservas financieras para absorber fluctuaciones tan drásticas.
Por otro lado, los consumidores enfrentan una reducción en el acceso a alimentos frescos a precios accesibles, lo que impacta en los patrones de compra y en la salud pública.
Proyecciones de especialistas
Analistas prevén que, si las medidas comerciales se mantienen, el alza podría extenderse a otros rubros agrícolas en los próximos meses. La volatilidad de precios plantea retos importantes para la planeación financiera de negocios vinculados al sector alimentario y obliga a reconsiderar estrategias de abastecimiento. La situación también abre debate sobre la sostenibilidad de las políticas arancelarias frente a la necesidad de garantizar seguridad alimentaria.
