La transición hacia una economía neutra en emisiones de gases de efecto invernadero es una necesidad por los riesgos físicos derivados de mantener las políticas actuales, un reto por la rápida y sustancial reducción necesaria y también una oportunidad para lograr sostenibilidad a largo plazo.
La acumulación de gases de efecto invernadero y la consiguiente subida de temperaturas se explica por la actividad productiva humana. Sin una rápida y sustancial reducción de las emisiones, la temperatura media de la Tierra terminará excediendo umbrales que desencadenarán efectos ambientales severos y costes económicos crecientes, incluyendo riesgos potencialmente catastróficos.
La emisión de gases a la atmósfera es una externalidad económica negativa de alcance global, requiere para su corrección de políticas públicas coordinadas a nivel mundial.
Existe incertidumbre sobre la magnitud de los efectos de la subida de temperaturas, pero el riesgo catastrófico e irreversible de los escenarios más representativos hace que la respuesta racional sea evitarlos mediante políticas urgentes y decididas.
Entre las medidas necesarias, el análisis económico da preferencia a un impuesto global uniforme al carbono más que a la expansión de los mercados de emisiones o subsidios al desarrollo de tecnologías verdes, que también son precisas. Los impactos distributivos de las políticas que se adopten son relevantes.
La innovación será crucial a largo plazo y las políticas medioambientales se ven favorecidas por los bajos tipos de interés y la oportunidad de las políticas post-pandémicas.
Estrategias para alcanzar los objetivos de sostenibilidad ambiental
- Involucrar a la sociedad: Impulsar de forma colectiva el desarrollo económico sostenible; así como asumir el coste de la transición a corto plazo para evitar costes mayores a largo.
- Gestionar el cambio: Minimizar los potenciales impactos negativos directos e indirectos. Regular la actividad económica para alcanzar los objetivos de la cumbre de París, 2015. Desarrollar planes estratégicos nacionales e internacionales.
- Innovar para la sostenibilidad: Optar por nuevas tecnologías menos intensivas en emisiones. Acelerar la adaptación a los cambios que ya se están produciendo para reducir los costes. Invertir en nuevas infraestructuras.
- Financiar la sostenibilidad: Movilizar el capital necesario para financiar la transición energética, la innovación y las nuevas infraestructuras. Avanzar en la regulación de las finanzas sostenibles.









