La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dialogan para regular el uso de pulseras «cashless» en festivales y eventos masivos. Una tecnología de pago que ha ganado popularidad en los últimos años.
Este esfuerzo conjunto surge ante la necesidad de proteger a los consumidores en un contexto donde los métodos de pago electrónicos experimentan un crecimiento exponencial.
El crecimiento de los pagos «cashless» se enmarca en una tendencia global hacia la digitalización de las transacciones financieras. Según un informe de PwC, se prevé que las transacciones electrónicas casi se triplicarán a nivel mundial para 2030. Superando los tres billones de operaciones. Este crecimiento refleja un cambio significativo en los hábitos de consumo, impulsado por la comodidad y la eficiencia de los pagos digitales.
El titular de la Profeco, Iván Escalante, ha reconocido la existencia de un vacío legal en torno a las transacciones «cashless». Aunque la asistencia a un evento y el pago por servicios adicionales, como tarjetas o pulseras, se consideran relaciones entre particulares, la Profeco busca garantizar que estas transacciones se realicen de manera justa y transparente.
La Profeco está en desacuerdo con la imposición de cargos adicionales a los consumidores por el uso de pulseras o tarjetas «cashless», especialmente cuando estos dispositivos están vinculados a la promoción del evento.
Se anuncia una reunión con la Condusef para establecer las condiciones para la devolución de saldos no utilizados y para abordar los cargos adicionales por reembolsos.
Fuente: america-retail.com
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