Inversoras de capital riesgo recaudaron 250 mdd para apoyar a empresas emergentes lideradas por mujeres.
Jenny Abramson era estudiante de segundo año en Stanford en 1997 cuando su madre, Patty, lanzó el Women’s Growth Capital Fund. En aquel entonces, recuerda la hija, estaba rodeada de “un millón de mujeres increíbles” en la escuela. No entendía realmente por qué las fundadoras podían necesitar su propia firma de capital de riesgo.
Veintisiete años después, Jenny Abramson no solo lo consigue, sino que acaba de recaudar otros 250 millones de dólares para Rethink Impact.
Eso consolida su estatus como la mayor firma de capital de riesgo dedicada a financiar a directoras ejecutivas.
Es el tercer y mayor fondo que Abramson y su socia gerente, Heidi Patel, han recaudado desde 2017, y casi duplica sus activos bajo gestión.
Fondos de riesgo
La exitosa ronda llega en un momento en que la recaudación de fondos de riesgo está camino de su peor año en una década, según Pitchbook.
Y cuando los esfuerzos para promover la diversidad, la equidad y la inclusión están siendo atacados tanto en los tribunales como en las corporaciones estadounidenses.
Aunque en los últimos trimestres el tiempo medio que tardan las empresas de capital de riesgo en cerrar nuevos fondos se ha extendido a 15 meses, Abramson y Patel consiguieron su Fondo III en tan solo un verano.
Entre los socios limitados se encuentran la firma de inversión de Melinda French Gates , Pivotal Ventures, y una serie de inversores institucionales.
“Alcanzar este tamaño significó que realmente tuvimos que cruzar el abismo hacia los LP institucionales, y eso fue lo que hicimos”, dice Patel.
“Tenemos más de diez fondos universitarios y fundaciones. Tenemos socios limitados de grandes instituciones financieras como UBS y Cambridge Associates”.
