México depende del Golfo para sostener su producción energética. De acuerdo con la Secretaría de Energía, más del 98 % del crudo nacional proviene del litoral del Golfo de México, una zona donde convergen operación industrial, transporte marítimo y riesgos por clima, piratería y robo de combustible.
Frente a ese entorno, Shel-Ha Solutions ha ampliado su capacidad operativa mediante un sistema de monitoreo para plataformas petroleras que combina embarcaciones acondicionadas, supervisión táctica y protocolos especializados.
El servicio parte de una premisa sencilla: proteger infraestructura crítica frente a riesgos crecientes de piratería marítima en escenarios abiertos y dinámicos, donde la distancia hacia la costa puede superar los cien kilómetros y las rutas de abastecimiento permanecen expuestas.
Por ello, las embarcaciones de Shel-Ha se diseñan para maniobrar en condiciones cambiantes, sostener vigilancia continua y disuadir incursiones hostiles, al tiempo que ejecutan procedimientos de respuesta sin interrumpir la operación energética.
Supervisión táctica y movilidad especializada
En estas misiones, personal capacitado opera sistemas de comunicaciones seguras, vigilancia perimetral y confirmación visual, todo bajo metodologías alineadas a mejores prácticas internacionales. Para fortalecer el componente estratégico, Shel-Ha integra a Latrun en el diseño de rutas marítimas, la definición de reglas de intervención y el establecimiento de puntos de control y enlace con tierra.
“El mar exige anticipación y precisión. En zonas de producción energética, una anomalía no solo representa riesgo para el personal, también para la continuidad operativa”, señala Carlos Juraidini Rumilla, director general de Shel-Ha Solutions. Además, añade que el objetivo es reaccionar sin escalar y mantener el flujo de la operación: “Aseguramos vigilancia, movilidad y comunicación constante para que el cliente mantenga control total del entorno sin fricciones”.
Asimismo, la gestión se complementa con análisis preventivo del clima, trayectorias de embarcaciones no autorizadas y protocolos de alejamiento seguro. Latrun participa en la capa operativa en tierra, donde se coordinan reportes, trazabilidad y decisiones tácticas. Esa combinación garantiza que la supervisión sea permanente y que la transferencia de información ocurra sin demoras.
Infraestructura estratégica bajo resguardo
El caso mexicano refleja una tendencia global. En regiones como el Mar del Norte y el Golfo de Estados Unidos se han fortalecido prácticas de protección marítima para instalaciones offshore. La región del Golfo mexicano sigue esa lógica ante la relevancia económica de su producción.
“Una plataforma no puede detener su operación. Por lo tanto, nuestro trabajo es prever cualquier incidencia y sostener la seguridad con intervención mínima”, subraya Juraidini Rumilla.
La relevancia de estos esquemas cobra sentido cuando se observa que, según Pemex, la producción nacional superó 1.6 millones de barriles diarios en 2025. Con esa magnitud, asegurar cada ruta y perímetro marítimo se ha vuelto un componente ineludible para la industria energética del país, donde Shel-Ha Solutions se posiciona con operaciones discretas, movilidad táctica y supervisión constante.
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